jueves, 25 de marzo de 2010

Hediondidades

Trabajar en una farmacia supone hacerlo en condiciones de limpieza óptimas, sin pequeños animales voladores en el ambiente y con ventilación adecuada.
Meeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeck!!!!! Error.
Ayer a las 9 am entré en la cueva y me llevé tal bofetada aromática que volví a subir las escaleras incrédula, blanca y con fatigas de muerte.
Viendo que Ele estaba dentro en plan valiente, me armé de valor, respiré hondo y corrí hacia la rebotica tratando de no inspirar.
Al instante me di cuenta de que había dos operarios en la zona de bebés (para más inri) dragando una arqueta pestilente.
Los pacientes entraban frunciendo el ceño y no tardaban un segundo en volver a salir. Los repartidores caminaban por el pasillo con las cubetas en la cabeza y nosotras tratábamos de sobrevivir a tamaño despropósito.
Desde ayer sé lo que se siente viviendo en el centro de una cloaca, y entre eso o morir intoxicada me decanté más por la segunda opción y mandé a Ele a comprar flis.
Se trajo cuatro botes. Dos de ellos los gastamos en medio minuto y los otros dos los tenemos de retén por si vuelve a repetirse el incidente.
Thanks God se solucionó, pero aun hoy tengo el olor incrustado en mi sufrida pituitaria


2 comentarios:

Landahlauts dijo...

Y no será del video ese de los pedos????

Veri dijo...

Meli, tenías la solución en la estantería de la V a la Z (Vicks Vaporub), una aplicación abundante por fosa nasal y arreglado!!!